Vida.

Sabían lo que tenía que pasar.

Bea.

La tensión subía. Mick tomó la piedra del suelo, Era yacía inconciente, Bea sacó su navaja y la empuñó con fuerza.

Bea y Mick se lanzaron. Uno contra el otro con sus respectivas armas. 

El dolor les cerraba los ojos, a ambos. Sólo a uno.

Ley.

Todo acabó, una se borró y el otro se desmayó.

Uno.

Mick despertó y Era estaba sentada a su lado. Le ayudó a levantarse y le dijo "No tienes que temer, él ya no está aquí. Seremos uno."

Blanco.

La puerta se acababa de abrir. El cuarto era blanco y por alguna razón se sentía bien.

Mick.

Era iba riendo "Esas ojeras te hacen ver como una chica" le dijo a él. Los nervios de lo sucedido le cambiaron el semblante a ella, pero Mick estaba malhumorado y Era se silenció por esa mirada fulminante. Un error. Mick trató de arreglarlo.

Era.

Llegó a la pared, con las manos heridas. Volteó a ver a Era, y le dijo: "Vaya día, eh." Con ese tono sarcástico que usaban muchas semanas atrás.